La producción de alimentos será sin duda lo que permitirá a la humanidad abandonar el planeta en busca de cumplir el sueño de la colonización espacial, no hay ninguna duda de ello. Sin embargo, aún falta mucha investigación para conocer como se comportan las plantas en el espacio.
En este sentido me he preguntado últimamente: ¿dónde será más viable cultivar plantas: en una estación espacial o en la superficie de algún planeta? Podría parecer una pregunta irrelevante pero será clave para el futuro de la humanidad... algún día.
Las plantas poseen una sistema de orientación que responde a la fuerza de gravedad y les indica hacia donde se encuentra el centro del planeta, de otra forma no se podría entender que la radícula siempre se dirige hacia abajo mientras que el hipocótilo hacia arriba, a pesar de la posición en la que se encuentren las semillas.
Con esto en mente creo que establecer cultivos en espacio extraplanetario, como por ejemplo en la Estación Espacial Internacional, sería un verdadero caos porque al no existir gravedad ni campo magnético nada le indicaría a la planta hacia donde es 'arriba' y hacia donde 'abajo'.
Entrecomillo los términos que indican posición porque como bien sabemos en el espacio no existe arriba, abajo, enfrente, atrás, etc., pero si quisiéramos desarrollar cultivos para producir alimentos tendremos que idear una forma para que las plantas definan sus direcciones de crecimiento.
Por esta razón es que creo que será mucho más factible cultivar en la Luna o en Marte, pues si bien sus fuerzas de gravedad son menores que en la Tierra al menos existen y en ellas podrían apoyarse las plantas para determinar la dirección en la cual deben crecer la raíz y la parte aérea.
Los experimentos con plantas en el espacio se han realizado desde que la primera estación espacial de la historia fue lanzada, la Salyut 1 perteneciente a los rusos y en donde mandaron un mini invernadero de apenas el tamaño de un CPU, donde se pudo constatar que las plantas crecen muy lentamente y son muy débiles en ausencia de gravedad o en microgravedad.
Además las plantas se desarrollaron a lo ancho y no a lo largo, lo que indica su confusión por la ausencia de gravedad y el hecho de que sin esta su crecimiento se da de manera aleatoria. Por si esto no fuera suficiente también la absorción de agua y nutrientes se realiza de manera muy deficiente.
Las sucesivas investigaciones referentes a la producción de alimentos en el espacio han dejado más preguntas que respuestas, pero aunque pocos lo sepan ya un par de cosmonautas han degustado unas cebollas cultivadas por ellos mismos, lo cual ocurrió en 1975 a bordo de la Salyut 4, cuando los dos inquilinos de la estación celebraron sus respectivos cumpleaños con unas cebollas, demasiado raquíticas por cierto, pero que comparadas con su escasa variedad seguro fueron un manjar.
Al día de hoy la investigación al respecto aún es escasa, pero confío en que en los próximos años el panorama cambiará y cada vez se harán más experimentos con plantas en el espacio. Solo espero no equivocarme tanto.
Imágenes de The Zeitgeits Movement y Aurelio Bastida
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