Un equipo de empresas e instituciones europeas están trabajando en la fabricación de sistemas de riego completamente biodegradables, tecnología que disminuiría la contaminación plástica generada por la agricultura. El proyecto lleva por nombre DRIUS y es la continuación de un proyecto previo denominado HYDRUS.
El objetivo del proyecto HYDRUS fue desarrollar tuberías utilizadas en riego por goteo que fuesen biodegradables. La razón de ser del proyecto DRIUS es desarrollar goteros que también sean biodegradables, de modo que todo el sistema se pueda compostear una vez que ya no pueda ser utilizado.
Uno de los principales retos del proyecto será diseñar goteros que funcionen con normalidad y que mantengan su forma durante el período de producción. Los futuros goteros además deberán poderse producir a gran escala, por lo que los materiales de su fabricación deben ser económicos.
Una cuestión importante es que este tipo de goteros, y los sistemas de riego en general, deberán ser utilizados en cultivos con ciclos cortos, cuya producción se extienda máximo a lo largo de un año. De esta manera queda claro que esta tecnología no sería adecuada para huertas de frutales, por ejemplo.
Las empresas involucradas en el proyecto son Extruline Systems (España), Metzerplas (Israel) y OWS NV (Bélgica), así como el Instituto Tecnológico del Plástico AIMPLAS (España).
Enlace: AIMPLAS
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